Triplete en casa.

Triplete en casa.

junio 19, 2019 0 Por Daniel Romaguera

Pleno español en el circuito de casa, un buen ambiente dispuesto a ver y disfrutar del motociclismo de primer nivel.

Marc Márquez va directo a por otro mundial, está vez con la fortuna de su lado.

 

Llegaba el séptimo gran premio del campeonato del mundo de velocidad al Circuit, Montmeló estaba preparado para albergar una vez más el GP Monster de Cataluña. Una buena entrada para el fogoso público, algún espacio en la parte de las gradas, pero con ganas de animar desde una pelouse más que poblada. Llena de color, más destacado el amarillo de Rossi, pero con buen ambiente y ganas de apoyar a los suyos. Debe haber mención para la cantidad de aficionados franceses al circuito, dada la cercanía con el país galo, la cantidad de franceses es obvia. Eso sí, más con el número 20 de Fabio Quartararo que los del 5 de Zarco. La nueva sensación del campeonato está cuajando un buen campeonato en su arranque con la Yamaha satélite del equipo Petronas.

 

Moto 3.

La carrera por excelencia de la emoción, de ir rodando en grupo y por donde intentan entrar tres motos por la trazada de una. De hecho Moto 3 tuvo muchas caídas, la más peligrosa fue en la curva 4 en la que Can Oncü marcó la primera caída en grupo del fin de semana. Una carrera dominada por la mayoría por motos de Honda que marcaban el ritmo frente a las pocas KTM que se acercaron a liderar la cabeza. La primera casilla del sábado fue para Arbolino, que vio como su moto le dejaba sin opciones en las últimas curvas del circuito. Dejando así vía libre para el resto, un resto en el que habían muchos pilotos españoles, y es que correr en casa da siempre ese pequeño empujón. El grupo se partió con la caída múltiple en la curva 4, dejando sin opciones a pilotos que podían haber logrado un buen resultado, la mejor noticia fue que nadie se hizo daño ya que la cantidad de volteretas dadas por Raúl Fernández fue tremenda.

 

En el grupo que se quedó en la disputa de la carrera, probaron a tirar Aron Canet y Jaume Masià con sus KTM, pero las Honda no dejaron opción a nada. Incluso Alonso López abrió un pequeño hueco y en plena recta sin rebufos fue cazado enseguida. Pasaban las vueltas y cada vez hubo más presión en los adelantamientos, golpes en la curva 10 que iban deshojando candidatos a la victoria. De entre tanto revuelo apareció el vencedor, Marcos Ramírez lograba su primera victoria en el mundial, la mala fortuna quedaba atrás y en el séptimo gran premio con el equipo Leopard se llevó el premio. La caída de Toba y Rodrigo revolucionaron el apretado final. El cero sumado por Dalla Porta al tener problemas con su Honda hace que todo quede reducido a una diferencia muy corta, con la consecución de tener como siempre una clasificación general entretenida.

Marcos Ramírez y Jaume Masià buscando la victoria en Montmeló.

 

Moto 2.

Como un misil salió Thomas Luthi al apagar el semáforo, del modo que cogió una buena renta de metros con respecto al resto. En su persecución iba el poleman Augusto Fernández, que intentaba ir tras el piloto suizo. Se separaron del grupo, un grupo que tiraba tras las marcas de Alex Márquez, iba recortando la diferencia décima a décima, cada poco estaba más cerca. Llegó a los pilotos de cabeza, se llevó con él a Navarro, y aunque nunca llegó a poder pasar a Luthi, estuvo cerca del segundo puesto del podio en su particular racha de puntos. El valenciano vive su mejor momento a lomos de la Speed Up. Seguían pasando vueltas y Márquez se iba en busca de la tercera victoria consecutiva en el mundial. La consiguió, y la crecida en su credibilidad empieza a ser temida en la parrilla. Se ha quitado ese mal fario que tenía colgado y sin caídas, ahora tiene más claro afrontar las carreras. Xavi Vierge quedó descolgado, Baldassarri sumó otro 0, lo que significaba que Alex Márquez se iba de Montmeló como líder del mundial. Augusto Fernández veía como se escapaba el podio, acabo cuarto en una carrera que fue de a peor según pasaban las vueltas. Un buen resultado para los pilotos españoles.

La lucha por la victoria en Moto 2 duró poco entre Luthi y Márquez.

 

MotoGP.

 

Llegada la carrera donde la mayoría de pilotos españoles son catalanes, las ganas estaban al mismo nivel que la de los aficionados. Un circuito muy conocido para ellos, con buenos sitios para adelantar. Con el último ingrediente de la receta para una buena dosis de decibelios, Quartararo se mostraba fuerte en todo el fin de semana. Tanto que logró parar el cronómetro antes que nadie y llevarse consigo el preciado reloj del poleman. Márquez tan activo como siempre estaba pegado a él, junto con Petrucci custodiaban el momento de arrebatarle la posición en la primera curva. La mala salida del francés y del español permitieron que el resto de pilotos se hiciesen hueco enseguida en el grupo. Las dos Yamaha iban bien, mejor que en las últimas ocasiones, estaban delante cuando se decidió la carrera en la segunda vuelta. La maniobra de Lorenzo tirando al suelo a Dovizioso, Viñales y Rossi, ha sido lo más comentado en tiempo. Una caída que propició la caída del resto. En el momento, Márquez se quedaba solo y a metros tras él se quedaba Petrucci, Quartararo y Rins. Los tres no pudieron seguir al de Honda, cogiendo décimas en todos los sectores y marcando una magnífica carrera en términos de concentración para terminar la carrera sólo.

Alex Rins tuvo una buena carrera, plantando cara a la Ducati de Petrucci.

 

El grupo perseguidor se iba entremezclando, tanto que hubo toques y más de una ocasión de caída por parte de los pilotos. En una de ellas Rins tuvo que irse recto mientras intentaba dominar la Suzuki en la primera curva, quedó por detrás de Joan Mir que estaba realizando una de las mejores carreras del año. Se decidía el podio entre Petrucci y Quartararo, llegando el francés como segundo. Tras ellos Rins, el siempre combativo Miller y una fenomenal actuación de Pol Espargaró que sigue atribuyendo de puntos a KTM. El piloto de Granollers está en el mejor año de su carrera en la categoría y las pequeñas mejoras de la  marca austriaca van llegando. Una carrera accidentada, Brandley Smith se llevaba por delante a su compañero Aleix Espargaró, dejándole una lesión de rodilla que hace dudar de su participación en Assen. 

Dura pelea por conseguir el segundo y tercer puesto del podio.

 

Las demás caídas, que fueron bastantes, hicieron que terminasen tan sólo 13 motos, con lo que puntuó también Guintoli, piloto de desarrollo del equipo Suzuki. Crutchlow también iba a la grava, con lo que la segunda mejor Honda fue para Nakagami y su octavo puesto. El japonés está también en un año en el que se va afianzando para un futuro con una Honda oficial.

Destacado papel de Joan Mir en un buen fin de semana.

 

El mundial queda más claro y a falta de dos carreras para el parón estival, Márquez puede tener mucho trabajo adelantado ya. El mundial no vuelve a España hasta finales de septiembre en Motorland, así que guardaremos bien éste gran premio en el apartado personal. Fuera de toda duda, el gran premio de Barcelona está muy bien amenizado. Su principal sponsor, Monster, ofrece una fiesta a lo largo de los días. Donde pilotos patrocinados por ellos, como Crutchlow, acuden para acercarse al público que allí espera el momento, música en directo al tiempo que regalan las latas de su propia bebida al público. Todo para el disfrute del aficionado que acude al circuito.

Crutchlow en el evento de Monster.

 

Siguiendo con lo personal y hecho que debo citar, son mis compañeros del circuito en la curva 9. Tengo muchos allí, en otras partes del circuito, pero siempre voy al 9. Donde te tratan bien, te sientes a gusto vuelves. Y es seguro que volvería una y mil veces con mis compañeros que hacen sentirme como en casa. Una mezcla rara, ya que veo las motos del mundial, pero no obtendría el mismo grado de satisfacción de no tenerles al lado.

Oficiales de pista del control 9.

Fotos: Julio Romaguera.

 

@pelut66

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