¿Qué está pasando con los motores diésel?

¿Qué ocurre con el diésel? ¿Realmente ha llegado a su fin? Vamos a analizar a fondo que está pasando en España con los motores diésel, qué tipo de vehículos no podrán entrar a las ciudades, cuáles son los distintivos ambientales de la DGT y mucho más.

Está claro que los motores diésel no están pasando por su mejor momento, digamos que se les está demonizando poco a poco, tanto que incluso el actual gobierno español se está planteando subir los impuestos del gasóleo de forma progresiva en los siguientes 4 años hasta alcanzar los precios de la gasolina. Pero ¿realmente son los diésel tan malos como nos quieren hacer creer? Y, sobre todo, ¿el diésel ha muerto en Europa? Bueno, pues debemos tener en cuenta que no todo lo que nos cuentan del diésel es cierto. Vamos a analizar que sucede realmente y por qué a día de hoy los vehículos con motor diésel son una opción perfectamente válida.

Panorama del diésel en España

Es un hecho que las matriculaciones de vehículos diésel en España (y Europa) bajan mes a mes, entre otras cosas, por el miedo a futuras restricciones en las ciudades. Como dato curioso, hay que recordar que allá por 2010 la cuota de mercado de los vehículos diésel en España era de un 70,6%, y en el primer semestre de 2018 en España, el diésel ha alcanzado una cuota de mercado de un 35,5%, es decir, después de 8 años se ha reducido prácticamente un 50%. A día de hoy se está dando la vuelta a la tortilla y son los gasolina los que están alcanzando grandes cuotas de mercado en nuestro país gracias también a los modelos híbridos que se están convirtiendo en modelos de mucho éxito en nuestras ciudades. Entonces visto esto, ¿qué restricciones existen actualmente en España?

Tanto en España como en Europa se están llevando a cabo restricciones a la circulación, pero hay que matizar que esas restricciones afectan tanto a modelos de gasolina como diésel.

En España, Madrid y Barcelona son de momento las únicas ciudades que están tomando medidas para las restricciones a la circulación. El ayuntamiento de Madrid ha anunciado que a partir de noviembre prohibirá el acceso y aparcamiento en el centro a los vehículos sin distintivo ambiental. En este caso hay que tener en cuenta que los vehículos afectados pueden ser tanto de gasolina como diésel. Los gasolina afectados son aquellos matriculados antes del año 2000 y los diésel afectados son los matriculados antes de 2006. Con esta medida, se pretende reducir la contaminación en el centro hasta un 40%.

Por otro lado, el ayuntamiento de Barcelona no permite desde diciembre de 2017 circular a los vehículos sin distintivo ambiental en días de alta contaminación. Pero además, a partir de 2020 también prohibirá la circulación de turismos sin distintivo ambiental en la zona de bajas emisiones. Y por si esto fuera poco, a partir del 1 de enero de 2019 de lunes a viernes, no podrán circular por la capital ni otros 39 municipios, los vehículos que no cumplen la normativa Euro 1 (turismos anteriores a 1997 y furgonetas anteriores a 1994).

Como podemos ver, al menos en España las restricciones a la circulación no sólo afecta a los vehículos diésel, sino que también afecta a vehículos de gasolina, eso si, el número de vehículos diésel afectados es mayor, debido a la diferencia de años entre un gasolina y diésel sin distintivo ambiental.

Distintivos ambientales de la DGT

Actualmente existen 4 distintivos ambientales en España:

B: Se da en aquellos turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculados a partir de enero del año 2000. También la encontraremos en turismos y furgonetas ligeras diésel matriculados a partir de enero de 2006.

C: Le corresponde a turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculados a partir de enero de 2006 y a turismos y furgonetas ligeras diésel matriculados a partir de enero de 2014 (los vehículos diésel tienen que ser Euro 6 sino se les aplica la etiqueta amarilla B).

ECO: Se da en vehículos híbridos convencionales y en híbridos enchufables con autonomía eléctrica inferior a 40 km. También se aplica en vehículos que utilizan Gas natural (GNL y GNC) y gas licuado de petróleo (GLP). También disfrutarán de este distintivo los vehículos micro-híbridos.

“Los vehículos micro-híbridos son aquellos que cuentan con un motor de combustión y un generador eléctrico de 48V que ayuda a reducir las emisiones contaminantes en un 15% de media. Este generador en fases de aceleración suministra un pequeño extra de par motor y potencia, y en fases de deceleración recarga la pequeña batería de 48V”.

0 EMISIONES: Se corresponde con vehículos 100% eléctricos, de pila de combustible y vehículos híbridos enchufables con autonomía eléctrica superior a 40 km.

Estos distintivos ambientales de momento no son obligatorios, pero en caso de que lo vayamos a colocar en nuestro coche es recomendable hacerlo en la parte inferior derecha del parabrisas. Si no hemos recibido este distintivo en el caso de que nuestro vehículo sea compatible, podemos comprarlo en Correos por 5 euros o en talleres autorizados.

Los diésel antiguos, el gran problema

Los vehículos diésel matriculados antes de 2006 se consideran muy contaminantes al no llevar distintivo ambiental de la DGT, pero dentro de lo malo cumplieron en su día con las normativas Euro de homologación (normativas que si que es cierto que no eran todo lo estrictas como lo son en la actualidad). El gran problema de los vehículos diésel, está relacionado con aquellos que no están homologados con ninguna normativa Euro, es decir, aquellos matriculados antes de 1994, ya que emiten unas emisiones de CO2 y NOX muy elevadas, aunque ya los diésel anteriores a la normativa Euro 3 (anteriores a 2005) se les considera bastante problemáticos.

Los diésel actuales ya son bastante limpios

Los actuales diésel Euro 6 son prácticamente igual de limpios que los motores de gasolina modernos y esto se debe a la utilización de sistemas como el AdBlue y los filtros de partículas.

El AdBlue es un producto basado en la disolución de urea al 32,5% en agua desmineralizada. Los depósitos de AdBlue suelen tener una capacidad de unos 15 litros y se suele repostar cada 10.000 kilómetros aproximadamente (tiene un precio de unos 0,6-0,7 euros/litro). Gracias al AdBlue las emisiones de NOX se reducen muchísimo, pero a cambio contamos con un elemento más de cara al mantenimiento.

Por otro lado, los motores diésel actuales cuentan con el famoso FAP o filtro de partículas. Los filtros de partículas eliminan un 99% de partículas sólidas, que son las verdaderamente responsables de enfermedades respiratorias, pero al igual que sucede con el AdBlue, tenemos un elemento de mantenimiento más y que además su reparación es bastante costosa en caso de avería.

¿Merece la pena comprarse un vehículo diésel a día de hoy?

La respuesta es SÍ, pero con ciertos matices. Comprar un diésel moderno no supone problemas de cara a futuras restricciones, o mejor dicho, va a sufrir las mismas restricciones que un motor de gasolina equivalente (actualmente cualquier vehículo gasolina o diésel sale del concesionario con el distintivo C verde) si se dan episodios de muy alta contaminación en ciudades como Madrid o Barcelona o las principales capitales europeas. 

Técnicamente los vehículos diésel son más eficientes que los vehículos de gasolina, pero un vehículo diésel actual no es recomendable para todo el mundo. Aquellos que hacéis muy poquitos kilómetros y la mayoría son en ciudad y trayectos cortos, tenéis como mejor opción los híbridos o gasolina convencionales (teniendo en cuenta su mayor gasto de combustible en ciudad respecto un híbrido o un diésel). Pero para aquellos que hacéis trayectos superiores a 30 km diarios de media y sin hacer trayectos cortos y la diferencia de precio os compensa, no tendréis problemas a la hora de comprar un vehículo diésel. También son muy interesantes los nuevos y cada vez más populares micro-híbridos, ya que nos aportan un extra de par motor y potencia y además nos beneficiamos del distintivo ambiental ECO de la DGT.

Desde Car and Gas somos conscientes de que ha sido un artículo largo, pero creemos que es muy interesante a día de hoy conocer más a fondo los motores diésel y ver si realmente merecen la pena.