Prueba Opel Adam S 1.4T 150CV
julio 22, 2017Un pequeño muy cañero y con mucho glamour
Cuando estás habituado a probar vehículos de todo tipo y te dicen que vas a probar un utilitario, por la cabeza te asaltan dudas del tipo “ojalá no sea un carrito de polos” o “espero que no venga muy peladito de equipamiento”, etc. , pero cuando te dicen que el utilitario es un Opel Adam la cosa coge color de repente y, si rizamos el rizo y la versión que vas a probar es la S, entonces ya cambias por completo el chip y esas dudas que te asaltaban se convierten repentinamente en nerviosismo y ganas de probarlo.
¿Por qué? Porque es un utilitario súper mono, súper divino, chic a la par de cool, con un diseño extraordinario y unas líneas que se graban a fuego en tu retina y, además, guarda en su interior una pequeña bomba de relojería en forma de motor de 1.4 litros turbo y 150cv, dispuesto a catapultar a este canijo de poco más de 3,7 metros hasta límites que ni mucho menos esperabas.
En Marcha
El Opel Adam S es una apuesta arriesgada por parte de Opel y es que este pequeño atleta está hecho para disfrutar en todos los sentidos. La variante S ofrece un toque muy Racing y picante y se debe a que, como hemos dicho al inicio, tiene un corazón enérgico. Bajo su diminuto capó se esconde un bloque 1.4 litros turbo que rinde 150cv y entrega 220Nm de Par que ofrece una respuesta magnífica desde muy abajo del cuentavueltas, pero es en la zona media alta donde te sacará la mejor de tus sonrisas.
Va asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades más bien cerradita y con recorridos cortitos que acentúan aún más el carácter deportivo.
Sus prestaciones son para poner a más de uno en un apuro de los buenos. De 0 a 100 km/h en alrededor de 8,5 seg y una velocidad máxima superior a los 200 km/h. Casi nada…
Para poder aprovechar esta caballería, Opel ha hecho una puesta a punto en el chasis y, sobre todo, en la dirección y suspensiones con respecto al resto de la gama. El Opel Adam S ha sufrido un rediseño del tren trasero y las suspensiones tienen un tarado bastante más duro, además goza de una dirección mucho más directa, rápida y más precisa, aparte de contar con un excepcional chasis que se muestra ágil a la par de firme y deportivo, lo que hace que el conjunto ofrezca un rendimiento, maniobrabilidad y estabilidad envidiable, siendo en carreteras reviradas donde este urbano saca pecho.
Ahora viene la segunda parte ¿cómo paro a este cohete? No hay problema, el Adam S monta un equipo de frenos de más de 300mm delante y 260mm detrás desarrollado por Opel Perfomance Components (OPC) con una potencia de frenado muy muy bestia ¡Nos ha encantado!
Destacamos varias cosas del Opel Adam S en este apartado mecánico/dinámico y es que a pesar de tener un pequeño Hércules como motor no se ha mostrado para nada sediento. Hemos llegado a hacer medias de 4,7-4,8l por autovías y la media total tras la prueba fue de 6,8litros habiéndole dado “bastante chicha”. Otro apunte positivo es que ¡el motor suena de verdad! Algo raro con las tendencias actuales.
Exterior e Interior
Exteriormente, el Opel Adam S destaca sobre el resto de la gama por varios elementos como, por ejemplo, el labio del frontal y un paragolpes trasero ambos de mayor tamaño, taloneras o un Spoiler de dimensiones generosas que le queda como anillo al dedo. Además, existe una gran lista de personalizaciones disponibles que acentúan aún más el aspecto Racing como, por ejemplo, la posibilidad de poder elegir la parrilla con efecto carbono como la que montaba nuestra unidad o la gran variedad de tonalidades y combinaciones que puedes elegir la pintura.
Desde el punto de vista de diseño, el Adam S es un outsider, un rompe barreras hecho para gustar a todos los públicos, algo extremadamente difícil. Sus líneas dulces, pero a la par musculosas, detallistas y atrevidas pero sin caer en excesos, son un claro ejemplo de ejercicio de diseño bestial.
Si dejamos de babear mientras damos vueltas observando su silueta y entramos en su interior, lo primero que te encuentras es un interior de infarto. Tus ojos apuntarán inevitablemente a los semi backets, firmados por Recaro, de cuero integral de nuestra unidad, ya que llevaba el pack cuero que incluye calefacción en las banquetas delanteras, y que nos regalan una ergonomía y un puesto de conducción exquisito. Si bien y por sacarle un pero, que ya es difícil, a la altura donde se apoya la cabeza tienen un pequeño realce que a veces resultaba algo molesto. Ojo, que nadie se imagine que es algo insufrible, no lo es, pero es que teníamos la necesidad de buscarle un pero a esta genialidad.
Tenemos que decir también que, aunque el espacio para las piernas en los dos asientos traseros es escaso, por motivos obvios, 3,7m, estos son bastante cómodos también.
Como anécdota os podemos decir que cuando entregamos el coche, comentamos al responsable de Opel el tema del reposacabezas que si era algo común a todos los Adam S o era solo de nuestra unidad y para nuestra sorpresa, éste escaló nuestras dudas al jefe de producto y a su vez éste siguió el ascenso al product manager para finalmente confirmarnos que era algo meramente estético. Esto sin lugar a dudas es algo que hay que valorar y agradecer.
El futuro comprador ha de saber que detrás del comercial que atiende en el conce, hay un equipo que se implica enormemente para intentar satisfacer todas sus necesidades y escucha todas y cada una de las sugerencias / dudas que se plantean para tratar de mejorar sus productos. Un 10 para Opel.
Si seguimos revisando el interior, observamos una calidad de materiales propia de vehículos de segmentos muy superiores y a un nivel de detalle asombroso. Desde los detalles en las puertas y el salpicadero lacados en el color que queramos, rojo red’n’roll en nuestro caso, hasta el revestimiento en cuero de la palanca cambio, freno de mano y volante, este último regulable en altura y profundidad y que también puedes configurar a tu gustó (en rojo red’n’roll era el nuestro). Todo encaja a la perfección y algo curioso que no habíamos observado en tiempo es que no se oía ni un crujido, ni un grillo ¡absolutamente nada! Y que dice mucho del elevado mimo con el que está construido.
Otro elemento más que cada vez que lo ves te saca una sonrisa es el tacómetro. Con un velocímetro tarado hasta 250km/h y un cuenta vueltas con tope en 8000rpm, con el fondo efecto carbono y una S en rojo dibujada en el medio cuyo significado es una declaración de intenciones de lo que es capaz de hacer el Opel Adam S.
Por otro lado, tenemos que hacer mención al equipo de infoentretenimiento del Adam S. Con un sistema de audio con una calidad óptima y lo mejor del sistema es que puedes vincular tu dispositivo móvil Android o Apple y controlar las aplicaciones desde su pantalla táctil, algo que en los tiempos que corren nos parece casi vital en cualquier modelo de coche. Además, como cuenta con el sistema Opel OnSTAR que crea en el interior una zona Wi-FI 4G, tendrás ocupados a tus acompañantes con un acceso a internet rápido y fiable.
Por último tenemos que hablar de otros dos apartados no menos importantes de su interior. Por un lado, está el reducido maletero, es lo que hay, es pequeño pero suficiente para meter equipaje para dos personas o bien para hacer la compra semanal. Además, si necesitas más espacio, puedes abatir los asientos y meter bultos de mayor tamaño sin problemas.
Opinión CAR and GAS
El Opel Adam S es un coche para comprar con el corazón, puesto que está pensado y diseñado para disfrutar. Se sitúa en un segmento en el que la realidad es que tiene muy pocos rivales: el Fiat Abarth 500 595 y el Mini son sus únicos rivales en cuanto a diseño y capacidad de personalización aunque el Mini ya juega en otra liga porque ya es un maxi.
Si buscas un coche divertido y exclusivo que puedas decorarlo y configurarlo acorde con tu personalidad y tener un vehículo único, este es tu coche. Además, goza de una calidad y ajustes excepcionales y, en materia de conducción y dinamismo, es un coche que te va a permitir ir tranquilo dejando que el resto se quede mirándote mientras conduces, o bien puedes hundir el acelerador y salir catapultado dispuesto a disfrutar como hacía tiempo que no habías hecho.
Acelera mucho, tiene un paso por curva fabuloso, es ágil, frena como un demonio, viene súper equipado, lo puedes configurar a la carta casi como te imagines y, encima, es tan bonito que una vez te montes en uno, estarás deseando buscar una excusa para no bajarte de él.
Muchos dirán que su precio es algo elevado. Nuestra opinión es que por alrededor de 18000€, según configurador y con el gran descuento que ahora puedes disfrutar, que cuesta la unidad que probamos, os decimos que no hay coche tan bien rematado, divertido y que satisfaga tanto como el Opel Adam S.